Colgante mineral perforado de labradorita

Colgante de labradorita agujerada con cordón negro de algodón con nudo corredero.

Medida: Entre 1 y 2 cm aproximadamente.

Color: Gris con vetas. A veces se puede ver un tornasolado azul.

Textura: Mayoritariamente lisa, con alguna grieta.

Incluye la primera limpieza energética del colgante y un pequeño resumen con de las propiedades de la labradorita.

La pieza que se entrega es similar a la de la fotografía de muestra. Ningún mineral es idéntico por lo que la tonalidad de color y forma puede variar.

PROPIEDADES DE LA LABRADORITA

• Mineral místico y protector. Facilita la iniciación a los misterios.
• Ayuda a conectar con las energías universales.
• Eleva el estado de conciencia.
• Elimina las fuerzas no deseadas del aura e impide los goteos energéticos.
• Aumenta la intuición y los dones psíquicos.
• Benéfica para reducir los miedos y las inseguridades.
• Sana viejas heridas o decepciones, incluidas las que vienen de vidas pasadas.
• Calma la mente hiperactiva.
• Despierta la imaginación.
• Nos da apoyo en momentos de cambios, otorgando fuerza y perseverancia.
• Benéfica para poder hacer transformaciones internas.

Texto extraído de la Biblia de los cristales.

LIMPIEZA Y RECARGA

Para limpiar nuestro colgante podemos usar varias opciones, escogeremos la que más nos guste o mejor nos vaya en cada momento.

• Colonias y espráis: Limpiarlo con un paño blanco humedecido con, por ejemplo, agua de florida o aroma celestial.
• Agua y jabón: Pasar el colgante por debajo del agua y limpiar con jabón neutro. Secar con un paño blanco.
• Incienso: Pasar el humo alrededor de nuestro colgante con un incienso de limpieza, como por ejemplo ruda, romero, palo santo, copal, clavo, sangre de dragón, etc.
• Crótalos y cuencos tibetanos: Colocarlo dentro del cuenco o debajo de los crótalos y hacerlo sonar. Su sonido y vibración limpiará la negatividad.
• Sal: No lo recomendamos ya que podría dañar el mineral.

Para recargar energéticamente podemos usar distintos métodos:

• La luna: Ponerlo bajo la luz de la luna, en fase creciente o llena.
• La tierra: Colocar encima de la tierra, desde una maceta con plantas a un jardín.
• El sol: Ponerlo bajo la luz indirecta del sol para no dañar su color.
• Una drusa: Colocar encima o al lado de una drusa de amatista o cuarzo blanco.